domingo, 31 de mayo de 2009

Mil y una formas de interpretar el mito: algunas Ledas contemporáneas (XXV)


Christian Klauser


Stefan Kahlhammer


Michael Kuehne


Aat Veldhoen


Adri de Bruijn

La muerte del cisne... para Aledia


Ana Pavlova de cisne...



La muerte del cisne, Ana Pavlova con la coreografía de Saint-Saens

viernes, 29 de mayo de 2009

Una Leda en el Ulises de Joyce


James Joyce, en su genial Ulises, también nos regala una mínima referencia a nuestra Leda, a colación de la inteligencia de sus hijos. Concretamente en la parte IV, en un extrañísimo episodio donde un anónimo narrador, combinando aleatoriamente textos de diferentes estilos, cita a dos hermanos de ridículo nombre con la aparente única intención de robarnos una sonrisa, para referirse al proceso de elaboración de la cerveza (seguro que la negra Guinness). Tan surrealista e incomprensible como todo su Ulises.

El párrafo en cuestión traducido:

"Terence O'Ryan le oyó y al momento le trajo una copa de cristal llena de espumosa cerveza de color ébano que los nobles gemelos Bungiveagh y Bungardilaun elaboran sin cesar en sus divinas cubas, astutos como los hijos de la inmortal Leda. Porque ellos acumulan las suculentas flores del lúpulo y las amasan y criban y molturan y cuecen y mezclan todo eso con jugos amargos y llevan el mosto al fuego sagrado y no cesan ni de noche ni de día en su tarea, esos hermanos astutos, señores de la cuba."

Y el original:

"Terence O’Ryan heard him and straightway brought him a crystal cup full of the foamy ebon ale which the noble twin brothers Bungiveagh and Bungardilaun brew ever in their divine alevats, cunning as the sons of deathless Leda. For they garner the succulent berries of the hop and mass and sift and bruise and brew them and they mix therewith sour juices and bring the must to the sacred fire and cease not night or day from their toil, those cunning brothers, lords of the vat."



James Joyce (Dublín, 1882-Zurich, 1941) fue un escritor irlandés en lengua inglesa. Nacido en el seno de una familia de arraigada tradición católica, estudió en el colegio de jesuitas de Belvedere entre 1893 y 1898, año en que se matriculó en la National University de Dublín, en la que comenzó a aprender varias lenguas y a interesarse por la gramática comparada. Su formación jesuítica, que siempre reivindicó, le inculcó un espíritu riguroso y metódico que se refleja incluso en sus composiciones literarias más innovadoras y experimentales. Manifestó cierto rechazo por la búsqueda nacionalista de los orígenes de la identidad irlandesa, y su voluntad de preservar su propia experiencia lingüística, que guiaría todo su trabajo literario, le condujo a reivindicar su lengua materna, el inglés, en detrimento de una lengua gaélica que estimaba readoptada y promovida artificialmente.

En 1902 se instaló en París, con la intención de estudiar literatura, pero en 1903 regresó a Irlanda, donde se dedicó a la enseñanza. En 1904 se casó y se trasladó a Zurich, donde vivió hasta 1906, año en que pasó a Trieste, donde dio clases de inglés en una academia de idiomas. En 1907 apareció su primer libro, el volumen de poemas Música de cámara (Chamber Music) y en 1912 volvió a su país con la intención de publicar una serie de quince relatos cortos dedicados a la gente de Dublín, Dublineses (Dubliners), que apareció finalmente en 1914.

Durante la Primera Guerra Mundial vivió pobremente junto a su mujer y sus dos hijos en Zurich y Locarno. La novela semiautobiográfica Retrato del artista adolescente (Portrait of the Artist as a Young Man), de sentido profundamente irónico, que empezó a publicarse en 1914 en la revista The Egoist y apareció dos años después en forma de libro en Nueva York, lo dio a conocer a un público más amplio.

Pero su consagración literaria completa sólo le llegó con la publicación de su obra maestra, Ulises (Ulysses, 1922), novela experimental en la que intentó que cada uno de sus episodios o aventuras no sólo condicionara, sino también «produjera» su propia técnica literaria: así, al lado del «flujo de conciencia» (técnica que había usado ya en su novela anterior), se encuentran capítulos escritos al modo periodístico o incluso imitando los catecismos. Inversión irónica del Ulises de Homero, la novela explora meticulosamente veinticuatro horas en la vida del protagonista, durante las cuales éste intenta no volver a casa, porque sabe que su mujer le está siendo infiel.

jueves, 28 de mayo de 2009

Erótica Leda de viernes...


Esta imagen me hace pensar en esa doble posesión que cuenta la leyenda... uno de día, el amante, otro de noche, el esposo: Zeus y Tindáreo. Pero también nos lleva a pensar en la ambigüedad del cisne: Dios y Hombre... en todo caso la imagen resulta erótica y provocadora... y Leda siendo objeto oscuro del deseo de ambos (dioses y hombres)...

Charles-Antoine Coype. 1740

Federico García Lorca: otro guiño para el Cisne de Leda...


García Lorca en un poema publicado en ABC (Madrid, 17 de agosto de 1986), titulado Álbum blanco, aunque de fecha incierta, habla un poco sobre la naturaleza del cisne... esa naturaleza que nos hace verlo como un medio para transportar almas, un poco haciendo referencia al cisne wagneriano, pero en el que se niega extrañamente la naturaleza sexual de Zeus, haciéndolo un dios más apegado al inframundo, a la noche, a la oscuridad.

Álbum blanco (fragmento)

de Federico García Lorca

CUARTA PÁGINA. Cisne

Ni Pan
Ni Leda

(Sobre tus alas
se duerme la luna llena.)

Ni bosque
ni siringa.

(Por tu plumaje
resbala la noche fría.)

Ni carne rubia
ni besos.

(De escarcha y sueño remolcas
a la barca de los muertos.)

(autor anónimo)


La referencia la hemos tomado de un estudio sobre el mundo mitológico de Federico García Lorca realizado por Rosa María Aguilar, titulado el mito griego en la poesía de García Lorca.

...........................................

Federico García Lorca (nace en Fuente Vaqueros, Granada, 5 de junio de 1898 y es asesinado el 18 de agosto de 1936). Fue conocido por su destreza en muchas otras artes, entre las que se incluyen la pintura. Fue poeta, narrador y dramaturgo, adscrito a la llamada Generación del 27, es el poeta de mayor influencia y popularidad de la literatura española del siglo XX. Como dramaturgo, se le considera una de las cimas del teatro español del siglo XX. Murió ejecutado tras el levantamiento militar de la Guerra Civil Española, por su afinidad al Frente Popular y por ser abiertamente homosexual.

lunes, 25 de mayo de 2009

Leda and Her Swan, de Olga Broumas


La poeta lesbiana militante Olga Broumas nos ofrece una sugerente versión de nuestro mito a través de un poema heredero de la Leda de Yeats. En él, el narrador, como un cisne, contempla con deseo a Leda, mientras un misterioso grupo llamado "los padres", en el fondo, cabecean asintiendo con sobredosis de lujuria. Fue publicado en 1999 en el libro recopilatorio Rave. Poems 1975-1999.

Leda and Her Swan

de Olga Broumas


You have red toenails, chestnut
hair on your calves, oh let
me love you, the fathers
are lingering in the background
nodding assent.

I dream of you
shedding calico from
slow-motion breasts, I dream
of you leaving with
skinny women, I dream you know.

The fathers are nodding like
overdosed lechers, the fathers approve
with authority: Persian emperors, ordering
that the sun shall rise
every dawn, set
each dusk, I dream.

White bathroom surfaces
rounded basins you
stand among
loosening
hair, arms, my senses.

The fathers are Dresden figurines
vestigial, anecdotal
small sculptures shaped
by the hands of nuns. Yours
crimson tipped, take not part in that
crude abnegation, Scarlet
liturgies shake our room, amaryllis blooms
in your upper thighs, water lilly
on mine, fervent delta

the bed afloat, sheer
linen blowing
on the wind: Nile, Amazon, Mississippi.


Skobeev Bereg


Olga Broumas (1949- ) poeta y traductora nacida en Grecia en el año 1949 en la ciudad de Syros pero muy joven se mudó a los EEUU. Comenzó su carrera poética escribiendo Beginning with O, con el cual ganó el premio Yale para jóvenes poetas en el año 1977. Uno de los jueces dijo respecto a la escritura de Broumas: "Broumas aspira a ser una arqueóloga de las zonas sin habla del cerebro, para volver a tientas al lenguaje ancestral de las madres". Escribe poemas abiertamente eróticos que combina elementos de la mitología griega. Este primer libro es una muestra cabal de eso, donde además de las expresiones dirigidas a sus amantes, crea un universo repleto de imágenes y ecos de la Grecia antigua reescribiendo muchos de sus mitos.. Broumas se ha dedicado a la docencia en muchas universidades, tomándose tiempo también para aprender otras cosas como el saxo, y otras prácticas físicas como el bodywork. El primer trabajo publicado en EEUU fue Caritas en el año 1976, una colección de poemas donde declara el amor de una mujer por otra. Según sus propias palabras escogió el título en griego porque "ninguna de las palabras disponibles en inglés que remitieran a la palabra "afecto" están libres de connotaciones heterosexuales negativas o limitaciones de significado...".


domingo, 24 de mayo de 2009

Leda, de Robert Graves


Leda
de Robert Graves


Heart, with what lonely fears you ached,
How lecherously mused upon
That horror with which Leda quaked
Under the spread wings of the swan.

Then soon your mad religious smile
Made taut the belly, arched the breast,
And there beneath your god awhile
You strained and gulped your beastliest.

Pregnant you are, as Leda was,

Of bawdry, murder and deceit;
Perpetuating night because
The after-languors hang so sweet.


Consuelo Child-Villiers


Robert Graves (Wimbledon, Londres, 1895- Deiá, Mallorca, 1985) fue un poeta, novelista y erudito inglés. Nació en Londres y estudió en la universidad de Oxford. Graves, que se consideraba más que nada poeta, escribió una poesía vigorosa, ingeniosa y, a veces, intelectual. Su primer libro de poesía, Hadas y fusileros (1917), narra sus experiencias en la I Guerra Mundial. Al principio de su carrera fue considerado como un poeta moderno (grupo que a comienzos del siglo XX en el mundo anglonorteamericano escribía una poesía lírica convencional dentro de un estilo posromántico), pero conforme avanzaba su carrera evitó identificarse con cualquier escuela o poeta y escribió de un modo intenso, claro y ordenado. Publicó varias ediciones de versos, entre los que se encuentran Poemas completos (1959, 1975). Sus poesías amorosas en las que combina la pasión con el cinismo, el amor con el erotismo, y lo personal con lo universal son muy conocidos. En 1968, en colaboración con el poeta sufi Omar Ali-Shah, editaron Los Rubaiyat originales de Omar Khayyam. Como prosista escribió una amplia colección de libros, desde Adiós a todo eso (1929, revisado 1957), una memoria militar satírica, hasta ficciones históricas como Yo, Claudio y Claudio el dios (ambos en 1934), Rey Jesús (1946) y La hija de Homero (1955). Sus investigaciones mitológicas sobre El vellocino de oro (1944) le llevaron a escribir otros libros de ensayo como La diosa blanca (1947) y Mitos y leyendas griegas (1968). En La diosa blanca, Graves busca el origen de la que denominó -la Gran diosa de muchos nombres- a través de la poesía galesa y el simbolismo arbóreo, la mitología griega y los cultos mistéricos, y las religiones del antiguo Egipto e Israel. Graves ejerció varias cátedras universitarias y a partir de 1929 vivió en la isla española de Mallorca, dónde murió en 1985.

sábado, 23 de mayo de 2009

martes, 19 de mayo de 2009

Benedetti: con cisnes en el rincón


El haiku (俳句) es una de las formas, en Japón, de expresar esa realidad que para los poetas es estéticamente imposible hacerlo de otra manera. Los haiku se componen, métricamente, de tres versos, de cinco, siete y cinco sílabas respectivamente. Hoy, nuestro viejito Benedetti nos deja, como un Haijin, una de estas maravillosas formas de decir:


Haiku 47

El río avanza
con los cisnes estáticos
y vanidosos



La vida sigue,
Mario sigue entre nosotros,
cisnes estáticos

El rincón del Haiku
Mario Benedetti


Nunca creas este falso abandono: una intertualidad con guiños al mito


Hoy buscamos otro guiño... triste, es verdad, de luto, también...

Este guiño no nos apetece, no me gustan las despedidas, al menos no me gusta despedirme de él. Pero toca. Aunque como sé, como el lo dijo en el "Chau número 3", es un falso abandono. Este es un guiño ya buscado, pospuesto para otra opotunidad, unos más directos retenían mi atención. Inevitable colocarlo esta semana. El guiño, casi indirecto de hoy, va dedicado no a Leda con su cisne -aunque es un guiño a ellos-, va dedicado al amigo de borracheras y tristezas, de rabias acumuladas, de amores infinitos, al poeta, compañero, camarada: Mario Benedetti.


Mario también se despidió ya de otro poeta, de otro poeta que sí le cantó a Leda, al Cisne, magnificamente. Aquí dejaremos fragmentos, no más (un ejercicio de verdadera intertextualidad), de un poema que el inmortal Benedetti le dedica al gran Rubén Darío al conmemorarse cien años de su nacimiento, y también es un poema de despedida, de recuerdo, de reivindicación: al abuelo Rubén (en el poemario a ras del sueño, 1967)

[...]
Después de todo, ya sabemos
por qué las princesas están tristes.

[...]
Díriase que el tiempo es otro, que en este mundo en llaga
no caben tus marquesas ni tus cisnes unánimes,
que al cándido hombre de hambre no le importa
la dieta frutal de miel y rosas

[...]
Lo cierto, lo vital, lo milagroso,
es que echaste a volar un decisivo
cuento de hadas verbales y no obstante tangibles

[...]
No tenemos verguenza de decir en tu nombre
"Un siglo es un instante",
y menos aún de pensar, en el nuestro: "Cien años, qué locura".


Y pensar que ahora, algunos de estos versos también pueden ser para el viejito Mario...
Sólo colocamos algunos fragmentos, hoy, la verdad, ya no me quedan ganas, estoy fragmentada, tampoco hay musas, ni imágenes...
Mañana un poco más de Mario, espero que menos triste...

PS: imagino que cuando muera Fernández Retamar haré el mismo ejercicio de intertextualidad...

domingo, 17 de mayo de 2009

Mil y una formas de interpretar el mito: algunas Ledas contemporáneas (XXIII)

.

Rob McBroom


Margaret Nielsen



Alexei N. Karasavin



Bob Kessel

Leda, de Francesca Woodman


Leda en los billetes islandeses


Los billetes de 2.000 coronas de Islandia están decorados en su reverso con nuestro mito. ¿Le gustará al cisne el frio islandes? La leditis nos abruma.


Leda entre las poesías líricas de Lope de Vega


Siguiendo con nuestra aproximación a las apariciones de Leda en las obras literarias del Barroco español, vamos a añadir un nuevo guiño del madrileño Lope Vega. Y no será el último....

Lope escribió en 1632 un magnífico poema lírico titulado La Dorotea. En el mismo, concretamente en el verso 366 de los 730 que compone esta obra, en el frafmento V, saca a colación la amorosa Leda aprovechando que dice tener dos vasos donde estan esculpidas Leda y Dafnes. Cualquier excusa es válida para hablar de nuestra Reina.

La Dorotea (fragmento)

de Lope de Vega

[...]

El que estuviere alegre
ni venga ni me vea,
que volverá de verme
con inmortal tristeza.
Cortad ciprés funesto
y acompañad mi pena
con versos infelices
de míseras elegías;
y el que mejores rimas
hiciere a las exequias
de mi querida esposa,
tal premio se prometa.
Aquí tengo dos vasos
donde esculpidas tenga
la desdeñosa Dafnes
y la amorosa Leda;
aquélla verde lauro
y con las plumas ésta
del cisne por quien Troya
llamó su fuego a Elena;
y dos redes tan juntas
que si sus nudos cuenta,
podrá suspiros míos
y yo del mar la arena.
Sacarán las Nayades
las Dríadas y Oreas,
aquéllas de las ondas,
las otras de las selvas,
las frentes que coronan
corales y verbenas
para que doble el llanto
tan mísera tragedia.


[....]




sábado, 16 de mayo de 2009

Sor Juana Inés y una Leda que es Leto...


Buscar a Leda es divertido, reconfortante y lleno de aprendizajes... nuestra Leda se encuentra en cuadros inesperados, en flores sorprendentes, en caramelos de los que nos da curiosidad su sabor, en bolsas de condimentos, en viñas y vinos y en la literatura... Nuestra Leda y su cisne aparecen en cada rincón de nuestro imaginario colectivo, de nuestros usos cotidianos, en las grandes obras. Es un mito, por extraño que parezca, que está más arraigado en nosotros de lo que imaginamos, incluso de lo que conocemos...

Y como esta búsqueda nos ha llevado por caminos inesperados, espinosos (hasta una rosa Leda tenemos), e insólitos, hoy la encontramos como una falsa referencia... como una Leda que es, pero que no debería ser, una referencial maternal, que nos hace pensar en Leda como la madre de casi todos los dioses...


Adam Miller


Un poco de la historia

Antonio Alatorre, del Colegio de México, hace un exhaustivo análisis en el magnífico artículo Hacia una edición Crítica de Sor Juana de la edición que, para celebrar los trescientos años del nacimiento de la grandiosa poestisa mexicana Sor Juana Inés, hace Alfonso Méndez Plancarte. Analiza, critica y estudia todos los cambios innecesarios hechos por Méndez Plancarte en aspectos tanto semánticos como sintácticos. Mas también Méndez Plancarte deja sin solucionar, aún más sin comentar, uno que otro, entre ellos, el de nuestra Leda (¿de referencia falsa, errónea, producto de los duendes de las imprentas?)

Y entre tanta crítica y cambio, Antonio Latorre, justifica lo que para algunos es una errata de Sor Juana y para otros una errata de imprenta. En el poema (romance aparecido en Inundación Castálida) Con ocasión de celebrar el primer año que cumplió el hijo del señor Virrey, le pide a su excelencia Indulto para un reo:

Que se goce vuestra Madre
de ser, en vuestros progresos,
la Leda de tal Apolo,
del tal Cupido la Venus.

Como todos sabemos, la madre de Apolo fue Latona (historia ya contada en nuestro blog), y nuestra maternal Leda ya sabemos a quién parió. Como anécdota, Latorre nos señala:

"Dirigiéndose a José, el hijito de los virreyes, sor Juana se refiere a la madre llamándola "la Leda de tal Apolo", craso error, muy probablemente de imprenta [...]; por necesidad métrica, sor Juana podrá haber empleado eruditamente el nombre griego de la diosa, Leto, y la confusión de Leto con Leda no es muy de extrañar". Solucionado el misterio...


Sor Juana Inés de la Cruz (San Miguel Nepantla, 12 de noviembre de 1651 -o 1648 – Ciudad de México, 17 de abril de 1695) nació en un pueblo del valle de México, San Miguel Nepantla, (actualmente dentro del municipio de Tepetlixpa, México). Hija ilegítima de la criolla Isabel Ramírez de Santillana y del español Pedro Manuel de Asbaje y Vargas Machuca, militar de Vergara (provincia vasca de Guipúzcoa). Aprendió náhuatl con sus vecinos. Descubrió la biblioteca de su abuelo y así se aficionó a los libros. Aprendió a leer en español y latín de forma autodidacta (este último, en veinte lecciones, escuchando a escondidas las clases). Aprendió todo cuanto era conocido en su época, es decir, leyó a los clásicos griegos y romanos, y la teología del momento.De joven estuvo en la corte virreinal mexicana, y de este tiempo hay muy pocos datos biográficos, aunque se sabe que fue dama de la virreina, la marquesa de Mancera. Quiso ir a la Universidad y en algún momento le pasó por la cabeza vestirse de hombre, pero al fin decidió meterse a monja. Después de un intento fallido con las Carmelitas, cuya regla era de una rigidez extrema que la llevó a un período de convalecencia, ingresó en la orden de las Jerónimas, donde la disciplina era algo más relajada, y tenía una celda de dos pisos y sirvienta. Allí pasó la vida, escribiendo versos sacros y profanos, villancicos cada Navidad, autos sacramentales y dos comedias. También sirvió como administradora del convento, con buen tino, y realizó experimentos científicos. Sor Juana erudita, ciéntifica, contestataria, rebelde, administradora, poetisa, dramaturga... y hasta se dice que fue amante de la virreina... toda una mujer de nuestro tiempo (este cuadro es una de las imágenes más conocidas de sor Juana, actualmente está en exposición permanente en la fortaleza de Chapultepec, el palacio del emperador Maxiliano).

Las Ledas de Raphael Kirchner


viernes, 15 de mayo de 2009

El canto del cisne, de Benito Más y Prat


El canto del cisne

de Benito Más y Prat

Fábula mitológica

- I -

En las aguas del Eurotas,
el de la margen de juncos,
cuando va a nacer la luna
canta el cisne moribundo;
tendidas tiene las alas
y los claros ojos turbios,
por eso la triste adelfa
se inclina en señal de luto.
Una flecha de Laconia
le ha herido con golpe rudo,
que se desprendió de un arco
por su desventura oculto.
Como va a dejar la vida,
da al viento su canto último,
más dulce que el de Sirena
en el piélago sañudo.
Suspensos están los céfiros,
oyendo el dulce murmurio,
y las armónicas voces
que dan música al crepúsculo.
Las cañas no se cimbrean
de los vientos al impulso,
y las cándidas palomas
se olvidan de sus arrullos.
Pájaros, aguas y flores,
oyen con encanto mudo
aquella voz saturada
con la mirra del sepulcro.
Entre las nieblas del río
se alzan al Olimpo augusto,
las notas de aquel concierto
de amor, amargura y luto.
La luna, por ver al cisne,
alzó su fanal nocturno,
y Júpiter, por oírlo,
paró de la noche el curso.
Las Nereidas y Sirenas
dejaron su alcázar húmedo,
y Venus, por más curiosa,
bajó a esconderse en los juncos.

- II -

Por la margen del Eurotas,
el de la orilla de juncos,
baja la princesa Leda ,
hija del griego Gläuco.
Va sembrando rojas flores
donde planta su coturno,
por eso, aunque pisa lirios,
no se le queja ninguno.
Una diadema de estrellas
ciñe sus cabellos rubios,
que no se acuerdan del cielo
desde que ella se la puso.
Lleva una falda de púrpura
que apenas le cubre el muslo,
y por vencer a la nieve
el blanco seno desnudo.
Un cinturón ciñe al talle
de diamantes y carbunclos,
pero brillan más sus ojos
y disimulan su lujo.
Entre sus trémulas alas
le trae el céfiro, confuso,
el melancólico canto
del pájaro moribundo.
Y embebecida, escuchando
aquel dulcísimo arrullo,
camina con pie tan leve,
que apenas encorva el musgo.
Separa con blanca mano
las ramas de los arbustos,
que por ser de ella tocados
se doblaron con orgullo.
Y al pie de una triste adelfa,
henchida de amargo jugo,
vio al ave de blancas plumas
tendida en lecho purpúreo.
Suspendida quedó Leda
ante aquel dolor profundo,
sintiendo su blanco pecho
taladrar arpón agudo;
avanzó, pues, impelida
por algún secreto impulso,
a su compasión extraña
rindiendo imprudente culto.
Tendió las trémulas manos
y entre sus brazos la tuvo;
¡ay de la princesa Leda,
hija del griego Gläuco!

- III -

Júpiter desde el Olimpo
vio aquel cuadro tierno y mudo,
y sintió al mirar a Leda
ansia de goces impuros.
Quiso reclinar la frente
en aquel seno desnudo,
y besar aquellos labios,
más rojos que los de Juno.
Y tal fue de su hermosura
el irresistible influjo,
que al ver al cisne en su pecho
celos del pájaro tuvo.
Súbito como el relámpago
abandonó el solio augusto,
envuelto en rápida nube,
que hasta Leda le condujo.
Y en átomos invisibles,
por un hábil subterfugio,
en las entrañas del cisne
sutilmente se introdujo.
Allí, del seno de Leda
en el templado refugio,
apuró Jove la copa
de los placeres impuros.
Pronto la inocente niña
probó de su engaño el fruto;
¡ay de la princesa Leda,
hija del griego Gläuco.


De "Hojas Secas: Poesía". 1870.


Alessandro Varotari detto il Padovanino. Leda e il cigno


Benito Más y Prat (Écija, 1846 - Écija, 1892) fue un poeta, periodista, autor costumbrista y dramaturgo andaluz. Hijo de unos comerciantes de origen catalán y padre del novelista José Mas, Benito vino por primera vez a Sevilla para trabajar como dependiente de comercio. Entonces dio a conocer su afición literaria al colaborar en los periódicos más importantes de la capital. Se introdujo en la vida literaria sevillana, trató a las mejores figuras de la cultura y del periodismo locales y dirigió al Ayuntamiento de Sevilla una petición para trabajar temporalmente en el Archivo Municipal, a lo que éste accedió. Fruto de esas nuevas relaciones conoció al propietario del Eco de Andalucía, don José Lamarque de Novoa, quien le confió la dirección del periódico en el que estuvo desde 1879 hasta 1890. En el Eco de Andalucía se publicaron sus obras poéticas Brisas del Genil, Hojas secas -de donde hemos extraido el poema-, y Nocturno, el drama La Cruz del hábito, y La Tierra de María Santísima, Fantasías, Estudios literarios, Estudios y bocetos y La Dama Blanca. También Mas y Prat colaboró en otras publicaciones como La Ilustración Española y Americana, La Ilustración Artística, La Ibérica, Bética y El Liceo Sevillano. En 1890 dejó de escribir por motivos de salud; diez años antes, la Academia de Bellas Letras le había premiado su composición La Feria de Sevilla.





Frivolidades de fin de semana


Mona Lisa sonríe, Leda observa... y disfruta.

When Mona Lisa Came to Tea. Anthony Christian